Alexis Ramsés Gómez Martínez club Atlas. Ejemplo a seguir "cuando de querer y luchar se puede" ES UN JOVEN DEL FÚTBOL MEXICANO.

Por Antonia García   

"¿Quieres jugar fútbol? esfuérzate que el balón ahí esta"

Muy buena frase ¿No? Que alguien te la diga cuando eres futbolista amateur te pone a pensar. Pero más aún cuando eres una promesa para el fútbol de tu país y que a una edad joven lo demuestras con pasión. Si, así es esta historia va por este camino. Y contársela es un placer. Ahí vamos…

Él es Alexis Ramsés Gómez Martínez del club Atlas (180) y orgulloso seleccionado nacional sub 17. Empezó a jugar a los 4 años en la escuelita de fútbol en Guadalajara, ciudad que lo vio nacer. Su papá Efrén Gómez Gil jugaba fútbol en Chivas y de ahí que la herencia recayó en su amado hijo. Que ahora lo práctica de la mejor manera posible, ¡vaya que sí! A los 4 años le empezó a tomar cariño entrenaba, echaba sus “cascaritas” y luego dijo “Esto es mi vida” y se abrió paso a un club. “Primero estuve yendo en 2 semanas 2 días a la semana a “González Gallo” una unidad deportiva, me mando en profesor Amador a la visoria en Cecaf donde en junio del 2008 fui aceptado, a los 12 años me integre al Club Atlas” así empezó su aventura por el fútbol como él me la cuenta.

Tuvo su novatada como buen inicio, eso jamás faltaría y él la cuenta así: “En la semana que iba a debutar toda la semana mis compañeros de mas arriba me decían ˂˂ya te toca ya te toca˃˃ y pues yo decía -no todavía falta tiempo-. Un día antes del partido me alinearon en el cuadro titular y ya estaba decidido, me dijeron ˂˂mañana prepárate para estar pelón˃˃ el día del partido llegue y ya tenia lista la maquina me quite la camisa y me empezaron a cortar el pelo me lo dejaron bien raro así todo “mordisqueado” y pues así jugué ese fue mi debut”. Algo que jamás olvidará… que para ser campeón, tienes que ser por una vez pelón…bien es solo un decir.

Ramsés Gómez es seleccionado nacional, pone en alto la camiseta de nuestro país. Para llegar a esto le pasaron muchas cosas, tanto caídas y triunfos. Pero lo más importante jamás se rindió hoy representa en la categoría sub 17 a México.

Una anécdota que jamás olvidará fue la siguiente: “Acabábamos de regresar de vacaciones y apenas nos iban a decir en que categoría quedaríamos nos pusieron en media luna y uno de los profes que estaba me dijo “no sé que te vieron los demás profesores pero si hubiera sido por mi no estarías aquí” yo me quede callado me puse a trabajar no para su gusto sino para demostrar que soy mejor y después de 2 años de estar en Atlas llego la primera convocatoria para la selección mexicana sub-15 y en esa venia yo sabia que era un paso grande y que había logrado algo que nunca había pensado lograrlo tan pronto estar en selección nacional” Impresionante este campeón es un ejemplo a seguir. “Cuando se quiere se puede”. Hoy pasa a ser seleccionado sub 17. Y vienen cosas estupendas para este jugador.

Se define como familia: “soy el que anda asiendo bromas, me gusta verlos sonreír, pero a la vez soy tranquilo”.

Su libro favorito… si bien es magnifico es “El Psicoanalista” de John Katzenbach.

Campeón, ejemplo a seguir, liderazgo… mentalidad positiva. Un futbolista que visualiza su futuro en su club de sus amores “ATLAS”, tiene la playera de la selección nacional bien puesta. Y no de esos jugadores que tomaron el balón y son hoy excelentes promesas. Él es Alexis Ramsés Gómez Martínez un joven del fútbol mexicano.

HISTORIA DE LUIS MANUEL LICERIO BUENO DE FUERZAS BÁSICAS DE SANTOS. UN CAMPEÓN CON SUSPIROS HECHOS REALIDAD.

Por Antonia García

Suspiros, así es “suspiros” impresionantes suspiros. Está historia es así una bella e inocente historia que me hizo suspirar. No debería decirlo ni mucho menos tendría el derecho a pronunciarlo ni sentirlo. Pero si de jugadores de fútbol con talento innato se trata lo siento con ganas. Él es Luis Manuel Licerio Bueno, playera número 70 del club Santos Laguna. Portero.

No inició en otro club  o en un equipo de su localidad, claro que lo hizo pero no precisamente lo suficiente para decir que de eso se valió, no estuvo en uno y otro hasta llegar a su actual club Santos Laguna. Talento innato en el balompié que basto con hacer presente su juego limpio, sus atajadas maravillosas de un niño de apenas 15 años.  Así sin más llegó al club de sus amores. Y vaya que sí va para ser un grande en esta práctica maravillosa. EL FÚTBOL.

Es del estado de Coahuila donde empieza su historia que no termina aún, no tuvo visoria como mencioné anteriormente.  Sus padres son futboleros de corazón, no profesionalmente pero esto fue lo que le inculcaron a su hijo y no se equivocaron. Como él nos dice “Siempre me inculcaron el fútbol y lo amé”. Hubo un torneo  donde jugaron contra Santos, lo vieron jugar y solo basto ese día para llamarlo y decirle “tú no te me vas” y ahora pertenece a fuerzas básicas de Santos Laguna. Así ni más ni menos como él nos cuenta “me vieron y me dijeron que fuera dos semanas para ver si me quedaba y si me quede gracias a Dios”.

Se define como una persona “divertida, responsable también tengo mis momentos de desastre, cuando hay que trabajar me gusta hacer las cosas bien para que me salgan lo mejor posible”. Y como familia “Soy buen hijo algunas veces me enojo con ellos, pero pues los amo porque siempre están conmigo cuando los necesito”.

Tuvo su novatada claro que sí, de esas nadie se escapa lo raparon, pero a este peque no le pasa como a sansón que pierde su fuerza, ah pero no. Tiene la suficiente como para seguir cumpliendo su sueño. Seguir aprendiendo de esas experiencias que se la van presentando como la que nos cuenta que le sirvió para ver en que andaba mal y mejoro en una de sus cualidades. “Me fue muy mal el peor juego que he tenido nada me salía me metieron dos goles por errores y desde ese juego creo que he sido más fuerte mentalmente”. ¿Todo un campeón? Claro que sí en toda la extensión de la palabra, un peque con futuro.

“Nada es imposible” me cuenta Luis Manuel Licerio, nada es imposible. ¿Ahora me explico porque los suspiros? Simplemente que luchar, sí sabes que eres bueno en algo que te apasiona lo vas a lograr, así sin más ni menos como esta historia de este campeón. Suspira así como este peque y vuelve ese suspiro una realidad.

Está apunto de participar en el torneo de fuerzas básicas sub-15. Un paso más que lo llevara por ese camino que a los 13 años empezó con el píe derecho.

Tiene talento, tiene pasión, garra, las ganas. Su historia no se limita en estas palabras porque aún no termina, su historia está por venir y estaré contándola con esos suspiros, que aseguro serán aún más. Él es Luis Manuel Licerio Bueno un joven del fútbol Mexicano.

HISTORIA DE BRAYAN LEOS LÓPEZ: PROMESA PARA EL FÚTBOL MEXICANO

Por Antonia García

Siempre es bueno ganar los partidos, verlos, practicarlos pero sin duda alguna experimentarlos de la mejor manera posible, el fútbol es así: Vivirlo.

Está historia se asemeja a eso precisamente con buena técnica y siendo el mejor en la cancha. Él es Brayan Leos López de fuerzas básicas de Monterrey. Posee la playera número "113" que con todo lo anterior se ha venido ganando.

 Su historia empieza en su natal Aguascalientes, tenía 5 años cuando dijo: “de aquí soy” y “el fútbol es mi vida”, el club Necaxa lo vió superarse y practicar su buen fútbol.  Sin embargo su papá era un tremendo en el balompié estuvo en Primera A Gallos, Neza, Correcaminos y Morelia… quién ha venido inculcándole a su hijo que el fútbol es de familia. A quién Leos menciona como “su más grande ídolo”.

El club Necaxa  estaba en descenso, Brayan Leos se  dedicó  a jugar con una escuela filial a Necaxa "la secundaria del futbol" y jugó  un torneo llamado “la Copa coca- cola, ahí tuvo contacto con un visor de rayados. El nombre que recordará toda su vida es el de José Luis Gonzáles,“mi entrenador de toda  la vida”, como él nos comenta.

Cuando llegó el momento de partir a realizar su sueño que ahora se llama “Rayados de Monterrey”, nos cuenta que fue muy difícil por el lado que estaría lejos de su familia y amigos. “Fue muy difícil, ya que yo era un niño acostumbrado a que todo me lo dieran, los primeros meses fueron muy difíciles, e incluso llegaba a las lágrimas por extrañar a mi familia, me costó mucho madurar para lograr hacerme una persona madura, tenía que valerme por mi mismo, me di cuenta de lo difícil que es la vida, sin embargo todo lo hacía por mi sueño” como todo un campeón se adaptó y ahora sigue cumpliendo su sueño.

Su frase motivadora: "En busca del sueño, en medio de la aventura".

El fútbol se ve, se escucha, se toca, se puede oler, el fútbol tiene sabor, se siente y se disfruta, por eso esta historia es más que eso. Un joven futbolista con un talento impresionante con el balón, es rápido (Tal como lo apodan sus compañeros  “dinamita Leos”) mueve, da pases con anotaciones a gol y está sólidamente como una promesa para nuestro fútbol mexicano.

Claro que sí, no me pasaría su novatada ¡uy!  Léanla con sus propias palabras: “si claro, eso no pudo faltar, como a las 3 semanas de que llegue compraron una máquina para el cabello, y pues raparon a todos los que éramos nuevos... no me pude negar (risas) tenía que aceptarlo”.

Un chico que aparte de su más grande pasatiempo (que aquí es para toda la vida) el fútbol.  Se divierte con sus amigos, tiene el hábito de la lectura, hasta me recomendó un excelente libro (“Adversidades” de Richard Quineboorg) El cine, las pláticas, las novias y muchas otras cosas que este campeón con futuro hace en su día a día.

A sus 16 años una promesa en toda la extensión de la palabra, que no cambia su club aunque no descarta volver con ese club que lo vio nacer (Necaxa) pero un campeón que puede lograr lo que se propone en cualquier lugar. Él es Brayan Leos López un joven del fútbol mexicano.

HISTORIA DE ERNESTO ESPARZA URZÚA DE ATLAS: JOVEN SOÑADOR Y UN CAMPEÓN CON FUTURO.

El fútbol se siente, se apasiona, se huele, se vive y se disfruta. Así como esta historia que estás apunto de conocer…

Una historia que precisamente demuestra lo que “la sangre de campeón”  se refiere.  El es Ernesto Jonathan Esparza Urzúa jugador de fuerzas básicas de ATLAS, playera número 81. Una mente soñadora, con alma de acero un futbolista incluso antes de ver el balón… su vida así el destino lo planteó y su costumbre así lo aceptó.  A su corta edad a participado en grandes torneos donde su club le ha permitido recorrer, su pasión por este deporte inició por su padre que también disfruta ahora verlo jugar.

Sus inicios “empezó  en lugar  en atlas chapalita, de un equipo que se llama atlas hacienda del real. “Pues empecé a jugar a los 4 años con niños de hasta 3 años más grande que yo y así fui evolucionando”… me cuenta con esa credibilidad que también demuestra en la cancha.

Una academia que le abrió las puertas a un futuro que sin dudarlo lo es y será… atlas Chapalita era una academia piloto en ese entonces de fuerzas básicas, la persona que lo condujo fue Salvador García Martínez que su nombre jamás olvidará ahora el dueño de la playera número 81.

Esparza es de Zapopan, Jalisco. Donde la distancia a su club no es digamos, determinante. Su familia ahí está, pero las vacaciones llegan y se van sin avisar. Claro que sí extraña a sus partes primordiales en su vida, pero como él nos dice: “Mi vida siempre ha sido así” una persona que tiene su objetivo bien planteado…

Al preguntarle sobre el cambio: Hogar- Escuela.  Ahora Cancha. Entrenar-. Escuela, nos dice: “No tuve niñez, por ir a entrenar, primero era en la tarde cuando lo jugaba por gusto y ya cuando fui creciendo me fui dando cuenta de lo difícil que era pero me gustaba, yo prefería ir a entrenar que ir a la escuela”.  Querer y poder no es lo mismo, aquí Esparza no los demuestra, te das cuenta que tu sueño es este y siempre te ha estado esperando, pero dejas algunas cosas o quieres esto o puedes aquello.

La educación aunque muchos digan que debes dejarla por el deporte que ellos casi no estudian… están en tremendo  error. El club les exije y para esparza es primordial, es un factor importante. Se define como persona: “madura, buen amigo, directo, muy carrilla centrado” y como familia: “muy comunicado, unido a ellos, son mi pilar, buen hijo”.

Un joven futbolista que no ha debutado pero que no falta mucho… ya tuvo la llamada “novatada” en tercera división con ATLAS… “en el vestidor me estaba bañando y llegaron todos con las tijeras del doctor y me empezaron a cortar el pelo, me lo dejaron horrible con pozos y todo “nos me cuenta con risas  de acordarse de esa ocasión que por supuesto tampoco olvidará también que como todo un campeón en ese debut metió gol y jugo todo el partido… vienen oportunidades excelentes para este soñador y que no podemos perder de vista. Una promesa para el fútbol Mexicano.

Una chico que visualiza al fútbol como esa cosa que a su vida siempre lo llena. Simplemente el fútbol es su vida… y el consejo que les daría a otros jóvenes futbolistas de menor edad o más que él es esta: “aprende de todo hasta el mínimo detalle hace la diferencia, esto del futbol da muchas vueltas, a veces arriba, a veces abajo”.

Sin duda alguna un chico con talento, una promesa, una bella historia que nace de un campeón con futuro… él es Ernesto Jonathan Esparza Urzúa un joven del fútbol Mexicano.

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